Chico adoptado descubre 22 años más tarde que su madre es su compañera de trabajo

Dar en adopción a un hijo debe ser una de las decisiones más difíciles para cualquier padre o madre. Es fácil señalar y apuntar con el dedo a quienes lo hacen, muchos juzgan sin conocer las circunstancias que llevan a alguien a hacer algo así. Lo que para algunos puede parecer falta de responsabilidad, para otros es un acto de amor y afecto infinito.

Steve Flaig
Steve Flaig

Christine Tallady dio a luz a un pequeño en octubre de 1985 en circunstancias económicas y familiares bajos las cuales le hubiera sido imposible criar y mantener a su hijo. Fue así que tomó la dolorosa decisión de darlo en adopción. Para ella, era la única manera en que su bebé podría tener una oportunidad de un futuro mejor.

Steve Flaig
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Al pequeño sus padres adoptivos lo llamaron Steve. Él, luego de cumplir 18 años de edad, comenzó a buscar a su verdadera madre. Para su fortuna, su madre había indicado a la agencia que le ayudó con la adopción que si un día el chico iba a buscarla le dieran todos sus datos.

Sin embargo, y aún teniendo el nombre de su verdadera madre, durante mucho tiempo la búsqueda por dar con ella fue en vano, pero el joven no se daba por vencido.

Steve Flaig
Steve Flaig

Fue entonces que, en 2007 y después del décimo intento de encontrarla, se dio cuenta que durante todo este tiempo había estado cometiendo un error al escribir el nombre de su madre.

Ya con el nombre correcto inició su búsqueda una vez más y se encontró con la sorpresa de que Christine no vivía lejos de él. Por aquellas fechas. Steve trabajaba como mensajero en uno de los negocios más grandes de la zona y, sabiendo que la empresa empleaba a cientos de personas, tuvo la idea de preguntarle a su jefe si conocía por casualidad a Christine Tallady. Para su sorpresa, su jefe no solo la conocía bien, sino que ella era empleada de la misma tienda en la que Steve trabajaba.

Steve Flaig
Steve Flaig

Durante meses, Steve y Christine se habían topado en el trabajo y cruzado miradas como dos simples compañeros. Ahora, por fin madre e hijo estaban juntos una vez más. 

Ella, que tiene dos hijos más jóvenes ahora comentó: “Tengo una familia completa ahora, todos mis hijos. Es la época perfecta del año, este es el mejor regalo de navidad”