La princesa Diana siempre destacó entre los demás miembros de la realeza por su singular manera de vivir. Ella constantemente rompía el protocolo de la familia real para demostrarse cariñosa y altruista con el pueblo. De igual manera siempre se mostró como una madre excepcional y dedicada para sus hijos Harry y William. Ella se esmeró mucho en darles una vida lo más normal y cotidiana posible. El mundo la recuerda como una mujer cariñosa y la venera desde entonces.
Afortunadamente existen varias fotografías donde podemos ver momentos divertidos y emotivos que pasó junto a sus hijos: numerosos paseos, viajes, actividades familiares y escolares.
Actualmente el mundo tiene sus ojos puestos en la corona británica por el reciente fallecimiento de la Reina Isabel II. Tras este acontecimiento el príncipe Carlos fue nombrado Rey Carlos III, volviendo a su ahora esposa, Camila Parker, reina consorte. Ante esto, muchos han mostrado su indignación por dicho nombramiento, pues piensan que no se lo merece.
“Siempre habrá una reina, y es Lady Diana” “Camila siempre será la otra”, “Nadie la quiere y peor como reina, fue la causante de la desgracia que le pasó a la princesa Diana”, “Nunca una amante podrá ocupar el lugar de la esposa”, fueron algunas de las críticas sobre la duquesa de Cornwall, ahora la reina consorte.
Por esto mismo ahora muchos se ponen a recordar el gran impacto que significó Lady Di para la corona y para el mundo.
La princesa Diana le dio un aspecto más humano a la realeza. Sus pequeños actos mostraron un lado más suave a la siempre estricta corona británica. Tomemos como ejemplo el día en el que Diana rompió con todas las reglas reales solo por el amor por su hijo Harry.
Cuando el pequeño Harry sólo tenía 7 años y Diana 30, su colegio organizó un festival por el día de la madre. En este los alumnos debían superar una serie de competencias para poder coronarse campeones. El día estaba lleno de espíritu deportivo. Ese día el príncipe Harry fue superado en la carrera de sacos por algunos de sus compañeros de clases.
Sin embargo, las madres también fueron invitadas a participar en una carrera, por lo que Diana no dudó en saltarse todo el protocolo de la casa real para poder competir en nombre de su hijo como todas las madres en el lugar, sin importarle que trajera falda.
La princesa Diana se quitó los zapatos de tacón, se puso en la línea de salida y corrió junto a todas las demás madres de la escuela Wetherby.
Esto nos regaló una de las imágenes más icónicas de la princesa Diana, siendo protagonista de una de las escenas más inusuales y “mal vistas” por ir en contra de todos los protocolos reales.
Era más que evidente que Lady Di no tenía previsto participar de ese modo, puesto que vistió para la ocasión un sweater negro y una falda plisada vaporosa.
Cabe destacar que tan solo un año después, en 1992, Carlos y Diana se separarían después de la oleada de escándalos por la infidelidad de Carlos con Camila Parker.
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