A casi 3 años de la transmisión del último capítulo de la exitosa serie Juego de Tronos de HBO, todavía quedan algunas dudas sobre el rodaje, los detrás de escenas o el sentir de los actores sobre ciertos momentos que fueron controversiales durante su emisión.
La serie basada en los libros de George R.R. Martin cumplió y excedió las expectativas de cualquier persona, puesto que cada domingo por más de 8 años, trajo todo tipo de emociones al público. Sin embargo, probó una vez más, que la magia de la televisión podía ser capaz de ser exitosa.
En papel, la producción no contaba con nombres de renombre, al contrario, decidieron elegir a actores y actrices poco conocidos o con una trayectoria corta, es por ello, que luego del éxito de Juego de Tronos, muchos de los miembros del elenco tuvieron muchas oportunidades de trabajo tocando su puerta.
Como el caso de la actriz británica Emilia Clarke, quien interpreto a Daenerys Targaryen, una fiel contendiente al trono por la naturaleza de su apellido y el poder de su familia, sin embargo, no siempre fue así, pues su personaje comenzó sin nada.
De hecho, los momentos más memorables de la actriz en la serie no fueron necesariamente por bonitos o tiernos, sino por las fuertes escenas que tuvo que grabar al lado de su compañero Jason Momoa, quien tenía el papel de Khal Drogo.
Clarke tenía apenas 23 años cuando grabó la primera temporada, por lo que era muy joven para entender el funcionamiento de lo que iba a salir al aire.
En una entrevista con el Daily Mail, Emilia confesó que el proceso no fue nada fácil pues tuvo que realizar intensas escenas de relaciones sexuales con Jason Momoa, donde tenía que aparecer desnuda.
La propia Clarke confesó que no sabía que tendría que hacer esas escenas cuando aceptó el papel.
“Nunca antes había estado en un set de filmación como este. Había estado en un set de filmación dos veces antes de eso, y ahora estoy en un set de filmación completamente desnuda con todas estas personas, y no sé lo que estoy destinada a hacer, y no sé lo que se espera de mí”, contó en una entrevista en el podcast Armchair Expert con Dax Shepard en 2019.
A pesar de lo incomodo que pudo resultar, su más grande apoyo fue el actor Jason Momoa, quien se portó como un caballero.
“Me cuidó en un entorno en el que no sabía que necesitaba que me cuidaran. Jason era un actor experimentado que había hecho un montón de cosas antes de llegar a Game of Thrones. Él dijo: ‘Así es como debe ser y cómo no debe ser. Me aseguraré de que ese no sea el caso’. Así que siempre decía: ‘¿Podemos conseguirle una bata? ¡Está temblando!”, indicó.
La actriz mencionó que ambos lloraron juntos al momento de grabar algunas escenas fuertes, por ejemplo, el día de la boda, después de la ceremonia es momento de que Khal Drogo tomó a Daenerys y prácticamente la obliga a tener relaciones con él, justo ahí Momoa comenzó a llorar sin parar.
“Recién ahora me doy cuenta de lo afortunada que fui. Eso podría haber ido de muchas, muchas maneras diferentes. Fue tan amable y considerado y se preocupó por mí como ser humano”, finalizó.
Contesta