«Llevo metiéndome la barriga desde que tenía 11 años», dijo la actriz, quien se negó a seguir escondiendo su estómago para aparentar estar «más delgada».
Por lo general, las actrices de Hollywood están sometidas a una presión constante sobre su aspecto físico. Deben tener un rostro liso, sin arrugas o acné; y un cuerpo delgado sin llantitas o un vientre abultado. Sin embargo, hay quienes deciden dejar de agobiarse por cumplir estándares de belleza tan altos y comienzan a mostrarse tal y como son.
Una de ellas es la actriz de 63 años, Jamie Lee Curtis, quien se cansó de aparentar ser delgada. Luego de que la contrataran para su último proyecto, decidió que ya no ocultaría su barriga. Además, desde hace tiempo, ella no disimula sus canas ni sus arrugas, ¡y no deja de ser un referente de belleza!
Curtis fue elegida para ser la protagonista de la película Everything Everywhere All At Once, donde interpreta a una agente de Impuestos Internos. La trama gira en torno a una inmigrante china que tiene un negocio fallido; pero también toca el tema de las presiones que enfrentan las mujeres al envejecer. La cinta dramática nos mostró por primera vez a una Jamie Lee Curtis con un vientre abultado.
A partir de entonces, la actriz se negó a seguir escondiendo su abdomen como en realidad es. En una publicación en su cuenta de Instagram, Jamie compartió una imagen de ella misma interpretando a su personaje y mostrando su estómago, la cual acompañó con el siguiente texto:
«En el mundo hay una industria de mil millones, billones de dólares, sobre ocultar cosas. Correctores. Moldeadores de cuerpo. Rellenos. Procedimientos. Ropa. Accesorios para el cabello. Productos para el cabello. Todo para ocultar la realidad de quienes somos. Y mi instrucción para todos fue: quiero que nada se oculte. Llevo metiéndome el estómago desde que tenía 11 años, cuando empiezas a ser consciente de los chicos y los cuerpos, y los jeans son súper ajustados. Decidí muy específicamente renunciar y liberar cada músculo que tenía y que solía apretar para ocultar la realidad. Ese era mi objetivo. Nunca me había sentido más libre creativa y físicamente»
Esta no es la primera vez que la actriz se pronuncia en contra de los estándares de belleza y da un mensaje sobre el amor propio.
Curtis tuvo que aprender a través de malas experiencias, las consecuencias negativas que traen las intervenciones para encajar en estereotipos. Cuando un director de cine le dijo que tenía «ojos hinchados», la actriz decidió recurrir al bótox y la liposucción para «corregir» su cuerpo; esto le generó una adicción a la hidrocodona, un tipo de opioide.
Ahora, con 63 años, Jamie Lee Curtis se siente fabulosa, abraza los cambios que ha tenido su cuerpo con el paso del tiempo y lucha en contra de los estándares de belleza.
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