La increíble historia de un minero que vivió bajo tierra por 17 años

En 1997, el oeste de China fue sacudida por un poderoso terremoto de casi 8 grados de magnitud en la escala Richter. Una mina de carbón, donde trabajaba Chung Wai, estuvo prácticamente en el epicentro del terremoto.

De los casi 200 mineros que estaban trabajando en la mina ese día, solo 51 lograron salir a la superficie, los rescatistas no lograron alcanzar a sacar al resto. Tras varios días de intentos la búsqueda se detuvo. Chung Wai fue el único sobreviviente de la mina porque se encontraba cerca de un tubo de ventilación reforzado.

La mayoría de los compañeros de este sobreviviente murieron en el derrumbe principal y algunos de quienes no murieron, lo hicieron tras unas semanas después de no recibir nada de alimento. En el caso de Chung, él fue ayudado con el suministro de alimentos que se encontraba en la mina para dichos casos. Con el tiempo también aprendió a cazar ratas, insectos e incluso comía musgo que florecía en los túneles.

El «rescate»

Hace unos años, las autoridades que se encargaban de la mina decidieron volver a ponerla en funcionamiento. Esperaban desde luego encontrar cadáveres de los antiguos trabajadores, sin embargo se llevarían una enorme sorpresa.

Al llegar al sitio donde Chung se encontraba, éste salió exhausto y debilitado, se comunicaba con una enorme dificultad y su estado mental causó una enorme preocupación. No había tenido contacto con nadie por más de una década y media.

Tras enviarlo a un hospital, el hombre recién rescatado, pudo comentar que siempre pensó que cada día que vivía, iba a ser su último, por lo que decidía vivir lo más que pudiera. Aunque siempre añoró la salvación, él ya había decidido que ese sería su estilo de vida por siempre.

Cuando los familiares del minero supieron de esto no lo podían creer, hacía tiempo que ya le habían llorado y que habían aceptado que ya no se encontraba con ellos. Comentan que ha sido difícil poder adaptarlo al mundo pues han pasado 17 años desde que lo dejó.