El restaurante rechazó la propuesta de la influencer y en cambio le propuso donar el consumo hecho por ella a la ONG Acción contra el hambre, la chica rechazó la propuesta.
Las nuevas generaciones y la nueva era digital han implementado nuevos modelos de economía y han traído de vuelta el sistema de trueque. Los influencers se han convertido en un sistema publicitario que no muchos entienden pero que es una oportunidad multimillonaria si dicho influencer está bien posicionado y con una buena cantidad de seguidores.
Sin embargo, la facilidad digital ha proporcionado a las personas diversas plataformas y medios para que casi cualquier persona pueda convertirse en influencer, por lo mismo, las empresas se han puesto más críticos al momento de ofrecer o aceptar los servicios de los influencers.
Estas nuevas maneras de ofrecer publicidad han sido fuertemente cuestionadas por diferentes usuarios, más que nada porque muchos no entienden los beneficios o simplemente no les agrada el sistema. Como ejemplo el caso de Edgar Nuñez que exhibió a la colombiana Manuela Rodríguez cuando ella le ofreció su servicio de publicidad a cambio de una comida para 2 personas. Sin embargo el chef mexicano rechazó la oferta y dio a conocer sus razones, principalmente porque Manuela tenía menos seguidores que él, por lo que el impacto del influencer sería mínimo.
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En esta ocasión viajamos a España, donde el restaurante El colmado, el cual criticó también este nuevo método de negocio cuando una influencer le pidiera comida sin costo con tal de promocionarlo en sus redes sociales.
El usuario de Twitter @soycamarero, se encarga de compartir a diario situaciones peculiares en restaurantes a través del mundo. Este 26 de junio publicó el caso del restaurante El Colmado, ubicado en Castellón, al cual una influencer de Instagram le ofreció 3 historias en la plataforma a cambio de una cena gratis para dos.
La propuesta fue la siguiente: “Oportunidad. Estaré en Castellón del lunes al miércoles. Buscando restaurantes chulos y que no haya visitado en Castellón he dado a parar con el vuestro. Me encantó el concepto. Me gustaría conocer si os encajaría realizar una colaboración en la cual os promocione”.
Si bien como mencionamos antes este es un modo común de intercambio para las redes sociales, a la administración del local no le pareció la propuesta de la chica. Aún así, el restaurante la invitó a probar los platillos del local, pagando su propia comida pero con una contrapropuesta: Todo lo que la influencer consumiera, la misma cantidad de dinero sería donada a la ONG Acción contra el hambre.
“Hola, la propuesta por nuestra parte es la siguiente: puede venir a comer, cenar o picar algo y el mismo importe que se gaste en nuestro establecimiento será donado en su nombre a la ONG Acción contra el Hambre. Podrá publicar y etiquetarnos sin ningún problema en las redes sociales, para poder ganar seguidores y reputación”.
Si bien tanto el restaurante como @soycamarero mantuvieron la identidad de la chica en secreto, los usuarios en redes sociales no dudaron en criticar a las acciones de la influencer: ¿Un influencer promociona un restaurante, ¿si come gratis se supone que hablara bien del mismo aunque la comida no sea buena?.
Al final, la influencer rechazó la contrapropuesta del restaurante, diciendo que ella realiza caridad “por otras vías” sin llegar a un acuerdo. Sin embargo, el restaurante realizó una donación para Acción contra el hambre de 100 euros.
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