La mujer escribió una nota en el cuaderno de su hijo con la esperanza de que la maestra la leyera y la salvara de su agresor.
El caso ocurrió en Mendoza, Argentina y afortunadamente tuvo un final dichoso. Una mujer víctima de violencia doméstica necesitaba ayuda urgentemente pues temía por su vida y la de su propio hijo. Su pareja la maltrataba desde hacía cuatro meses y no sabía qué más hacer; así que vio como su último recurso pedir ayuda a través de su hijo.
La mujer, cuyo nombre no fue revelado por su seguridad, un día se armó de valor y escribió una pequeña nota en el cuaderno de su hijo. La nota iba dirigida a la maestra pues creía que ella vería el texto y sería capaz de ayudarla. En la hoja describió su situación, le hizo saber que estaba siendo agredida por su pareja, de quien dejó el nombre completo y además le pedía que enviara inmediatamente a la policía a su casa.
«Mi pareja me pega y no tengo celular» se puede leer.
Estas palabras causaron un enorme impacto en la maestra, quien sin dudarlo llamó a la policía y explicó la terrible situación que vivía la madre de uno de sus alumnos. Por su parte, las autoridades también actuaron rápidamente pues tienen un protocolo especial para las víctimas de violencia de genero.
La policía de Mendoza llegó al domicilio proporcionado por la mujer y encontró una cruel escena. La madre del pequeño estaba cautiva en su propia casa, encerrada en el baño para evitar las agresiones de su pareja. Las autoridades la liberaron y minutos más tarde ella explicó que su pareja la había maltratado los últimos cuatro meses y temía por su propia vida y la de su hijo.
«Seño, sé que puedo contar con usted, necesito me ayude y cuando lea esto mande a la policía a mi casa … mi pareja me pega, no tengo celular, su nombre es …»
Sin saberlo, al enviarle la nota a la maestra; esta mujer no solo pidió auxilio; sino que también estaba haciendo una denuncia ante las autoridades. Esta pequeña carta de 5 líneas le devolvió la lbertad a ella y a su hijo, quienes ahora están tranquilos y salvo pues el agresor ya se encuentra detenido.
Esta historia nos demuestra la importancia de la sororidad y de demostrar que se puede ser una persona confiable para pedir ayuda en casos tan delicados. La mujer sabía que podía recibir apoyo de la maestra de su hijo y no se equivocó pues gracias a su actuar, la mujer se libró de su agresor.
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