¿Quién no se ha equivocado? Satanás nos usó para escandalizarnos y tirar nuestro nombre en el barro.
La infidelidad y la traición no son algo extraño en la época actual. Si bien es de conocimiento público que estas situaciones suceden, no dejan de ser algo que está mal. Lo más irónico del asunto es que aquellos que juran tener una moral mayor a la del resto de las personas, a veces son los que cometen los peores actos, sin importarles los demás.
El mundo religioso no está exento de este tipo de situaciones. Películas como Spotlight (2015) se han encargado de demostrar que este espacio tampoco es inmune a este tipo de situaciones. Aquellas personas que se encargan de hablar sobre la forma correcta en la que la sociedad debe comportarse, puede que sean las primeras en cometer faltas a la ética, pisoteando sus propias palabras.
El caso de hoy que ejemplifica este tipo de situaciones sucedió en Campo Grande, Brasil, donde una pareja de pastores cristianos se vio envuelto en un terrible caso de infidelidad.
El caso involucra a un cura evangélico que encontró a su esposa, que también es una pastora religiosa, teniendo relaciones s3xu4l3s con otro clérigo en un motel. El cura grabó la escena de cuando entró a la habitación y el video no tardo en difundirse por las redes sociales del país.
Según la reseña hecha por Campo Grande News, el hombre le gritaba al otro “pastor del diablo”, mientras a su esposa, con quien había estado 21 años en matrimonio, le dijo “Me arruinaste la vida” en un acto desesperado mientras golpeaba las puertas.
Quizás lo más irónico del asunto es que el religioso involucrado trabajaba en ayudar a familias para no disolverse, siendo el párroco de la Iglesia Apostólica Jesucristo Regresa en la localidad. “Destruiste a mi familia ¿Por qué hiciste eso?” fueron otras de las palabras que le dijo al traidor.
Aunque fueron atrapados en el acto, la mujer salió en su defensa, culpando al demonio de obligarlos a cometer este acto de infidelidad. En su conversación con Campo Grande News, admitió que cometió un error y espera que se resuelva.
“¿Quién no se ha equivocado? Ya pasó, no puedo volver atrás. Quien nunca se ha equivocado, que tire la primera piedra. Mientras juzgamos, estamos siendo juzgados”, expresó.
“Mi esposo ya me perdonó. Hubo errores, pero no es culpa nuestra. Fuimos víctimas de Satanás para escandalizarnos y tirar nuestro nombre al barro. Todos fuimos usados por el Diablo. Llegó mi esposo hablando del pastor del Diablo, entonces todos eran usados por el Diablo“, agregó.
No hay mucho que la mujer pueda argumentar, pero espera que no la juzguen porque todos somos pecadores ante los ojos de Dios, según su pensamiento.
“El que va a señalar y criticar se está dando por vencido, porque ya lo hemos acertado. Ahí está cada uno con Dios“, expresó.
Contesta