Aunque estamos en un mundo repleto de tecnología y procedimientos que atentan con ralentizar el paso del tiempo, nada ha podido hacerlo, sin embargo, esa termina siendo la magia de que las cosas envejezcan, ver los cambios de todo lo que nos rodea y saber que las huellas del tiempo siempre serán visibles.
Los siguientes ejemplos son objetos que han estado presentes desde el momento en que fueron desempacados o fueron considerados nuevos hasta que sirvieron su función por más tiempo del pensado.
Te vas a sorprender de que además del sol, otras cosas pueden desgastar a un objeto, en ocasiones es el uso frecuente y en otras, el abandono total.
1. A juzgar por la foto, alguien lleva mucho tiempo atendiendo en esa tienda.
2. «Esta guitarra tiene 15 años y ha sido usada en más de 100 actuaciones»
3. La tarjeta es la culpable del daño a la pared.
4. Usaron muy seguido esa lupa.
5. La taza preferida del café.
6. Las huellas en el piso refleja la cantidad de veces que los clientes han dejado caer piezas.
7. Estos escalones tienen 400 años de antigüedad y están en una casa de Praga.
8. Las zapatillas para correr de la derecha cubrieron 1500 km, ya era momento de reemplazarlas.
9. El candado tiene muchos años sin ser utilizado.
10. El poste de madera ha tenido que pasar por una dieta intensa en su parte baja.
11. Esta fuente ya es tan antigua que un chorro de agua ha perforado un agujero en el cuenco
12. «Recibí mi primer taladro Makita hace 26 años y después alguien me dio el suyo que es más viejo».
13. «Tuvieron que pasar muchos años y conejos para que la cerca se viera así»
14. De vez en cuando, es recomendable cambiar la cubierta de tu teclado.
15. Así se ve un sombrero nuevo vs uno con 7 años de uso.
16. «Parece que ha llegado el momento de sustituir la vieja espátula por una nueva»
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