En el lejano diciembre de 2021, una joven Jennifer Lopez y Ben Affleck se conocieron en en el set de la comedia romántica Gigli, ese fue el momento que marcaría sus vidas sin que se dieran cuenta, conforme pasó el tiempo y todo se puso en su lugar, ambos comenzaron un breve noviazgo luego del divorcio de Lopez, decidieron comprometerse pero a principios de 2004 debido a la excesiva atención de los medios terminaron.
20 años después se reencontraron casi como una casualidad, él venía de una relación fallida y ella de otro compromiso cancelado, a pesar de todo, le dieron otra oportunidad a su amor y ahora ya pueden decir que son marido y mujer.
Aunque muchos pueden tachar su boda de atípica, para ellos fue muy especial y sucedió justo en el momento indicado. Durante una celebración íntima, espontánea y llena de mucho amor, los dos actores se dieron el «sí» en una pequeña capilla de Las Vegas, Nevada.
En lugar de hacer todo en secreto, la cantante quiso compartir su alegría con sus fans a través de una conmovedora carta en su sitio web. En las palabras solo se nota lo feliz que se encuentra, además de que contó los detalles privados de la ceremonia, los dos obtuvieron su licencia, llevaron ropa de su propio closet y con sus hijos de testigo, Affleck y Lopez sellaron el amor que comenzó hace dos décadas.
Las primeras imágenes que recibió el mundo fueron cortesía de la ahora señora Jennifer Lynn Affleck, nombre con el que firmó la carta y con el cual probablemente ahora querrán que la llamen.
De hecho, según el certificado oficial, JLo ya aparecía con ese apellido al momento de llenar el apartado de nombre completo luego del matrimonio.
En las fotos solo se puede ver lo enamorados que están y lo mucho que esperaban este ansiado momento, el cual se hizo realidad de la manera menos pensada.
“El amor es paciente. Con amor, la señora Jennifer Affleck”, escribió JLo al anunciar su esperada boda.
La boda del año fue en Little White Wedding Chapel, sitio muy popular entre las celebridades, además posaron en el famoso Cadillac Rosa propiedad de Elvis Presley.
No nos queda más que decirles ¡felicidades! y desearles lo mejor en su nueva vida.
¡Qué vivan los novios!
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