Dicen que de todos los animales, el perro es el mejor amigo del hombre y con justa razón, tener a un compañero de aventuras, de descanso y de diversión es fuente de felicidad y amor. Sin embargo, el destino de muchos caninos no siempre es feliz, hay miles de animalitos abandonados, en situación de calle o maltratados y es cada vez más complicado salvarlos a todos.
Es muy común que al momento de querer un perrito elijan a los cacharritos en lugar a los mayores, es por eso, que muchos perros adultos o en su vejez son los relegados y sin hogar.
También suele pasar que cuando los perros entregan los mejores años de su vida, las familias los entregan o abandonan en las calles por ya no querer cuidarlos en su vejez. Ante esta situación, un hombre decidió tomar cartas en el asunto y abrió un santuario para perros viejitos.
El refugio está inspirado en su perra llamada «Shep». Rusell Clothier tuvo la idea desde que trabajó como voluntario en lugares así y vio que perros ancianos tenían problemas para encontrar un nuevo hogar.
Shep es una mezcla de basset hound beagle de 10 años, y la adoptó el fundador de Shep’s Place, Russell Clothier.
“Los primeros ocho a diez años han estado en una casa y, de repente los abandonan, su casa se ha ido”, dijo Clothier. “Poder volver a darles esa sensación y hacer de los años que les quedan una época dorada para ellos, tenemos esta casa que nos hace sentir bien a todos”.
Con 1 hectárea y media como propiedad los perros tienen un espacio propio para convivir y tratar de encontrar nuevas familias. “Y si esto es difícil, podemos ser su hogar permanente y amoroso” Nos enfocamos en perros mayores que ya han pasado un tiempo en un refugio o rescate, esperando encontrar una familia. No aceptamos perros directamente del público” dijo Rusell.
La calidad de vida a la que estaban acostumbrados los canes es muy diferente de acuerdo al historial de cada uno, algunos pueden ser agresivos cuando recién llegan al refugio y otros pueden ser muy retraídos.
Shep’s Place les ofrece un futuro mejor por lo menos en sus últimos años, además de que de alguna forma buscan que los perros encuentren la felicidad con otras familias o ahí mismo.
“Estamos comenzando con algo pequeño, con algunos perros, y aumentaremos con el tiempo. Necesitamos voluntarios, así que si ayudar a los perros viejos y dulces, puedes unirte” de acuerdo a su página.
Es importante mencionar que es un lugar manejado por voluntarios que pasan su tiempo libre y ayudan a que estos amiguitos puedan tener un mejor lugar, además todos están consientes que tarde o temprano, los perros que tengan van a fallecer, sin embargo, merecen tener un lugar al cual llamar hogar.
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