Murió en su fiesta de XV años: Daniela Montemayor quería ser doctora.

La joven se desvaneció en medio de la pista por un infarto la madrugada del domingo 31 de julio. Vecinos y familiares la recuerdan con amor. 

La madrugada de este 31 de julio en Coahuila, México, Daniela Montemayor perdió la vida mientras celebraba su fiesta de XV años. Sufrió un infarto agudo mientras bailaba cerca de las 2 am. A pesar de que sus padres la llevaron a un centro médico, dos horas después se reportó su fallecimiento. La noticia conmovió a los presentes, amigos y familiares, quienes dieron declaraciones sobre la joven cumpleañera. 

Según las declaraciones de sus familiares, Daniel fue diagnosticada con un soplo en el corazón  y fue muy enfermiza desde pequeña. Esto fue lo que la motivó a desear convertirse en doctora. 

Según su tía Magdalena Montemayor, años después le hicieron estudios para operarla, pero los médicos aseguraron que estaba bien. 

Personas cercanas a ella la recuerdan como una chica estudiosa y seria, fue muy cercana a su madre y cero problemática. 

El sábado se llevó a cabo su fiesta de quince años. Uno de los momentos más conmovedores fue cuando bailó el vals con su papá con la canción “Tú sangre en mi cuerpo” de Ángela Aguilar, porque se la dedicó a su padre. “Fue un recuerdo bonito, nos dejó muchas cosas buenas”, comentó una familiar.

La fiesta continuó hasta altas horas de la noche y Daniela se mostraba alegre y risueña: “Anduvo bailando desde las 3-4 de la tarde. Todos nos quedamos asombrados, bailó con todo mundo”, recordó Magdalena, quien dijo que a Daniela la veía como a una nieta.

Pero en la última parte de la noche, la joven se desvaneció minutos antes de las 2 de la mañana del domingo. 

“Era demasiado seria y ese día que falleció era una mariposita, soltó todo. Siempre fue una niña muy seriecita, educada, reservada, de todo le daba pena”.

La familia, por supuesto, está muy afectada por lo sucedido, pues Montemayor estaba muy emocionada por su fiesta, uno de los días más deseados por la menor.

“Era tanta su alegría. No tuvo tiempo ni de abrir sus sobres, ni regalos. Dentro de su alegría se fue. No lo esperábamos”, concluyó Magdalena. 

La tía Magdalena aseguró que deja un vacío y dolor muy profundo para la familia, pero dijo que la recordarán como a una muchacha alegre, que gustaba de toda la música y quería ayudar a la gente.

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