El joven sufrió el accidente cuando se disponía a terminar con la vida del toro.
Un joven torero de 23 años recibió una cornada directamente en el muslo derecho durante una corrida en Segovia, España. Manuel Diosleguarde sufrió de una perforación de la arteria femoral y la vena safena. La herida tiene 25 centímetros de profundidad y el torero se encuentra por el momento en estado crítico luchando por su vida.
Diosleguarde fue corneado cuando se disponía a desvivir al toro, en la última parte de la corrida en Cuellar que se celebró este domingo.
El toro rompió completamente la arteria y vena femoral, además de romper numerosas ramificaciones de venas y destrozar la pierna derecha del torero.
“Nos dijeron que, todo lo malo que le pueda pasar, lo tienen controlado y que todo, dentro de la gravedad, va transcurriendo bien y sin contratiempos”, confesó su representante José Ignacio Cascón.
Hasta el momento el torero ha sido operado en tres ocasiones para poder salvarle la vida. Sin embargo, su situación sigue siendo delicada. Los doctores debieron reconstruirle la zona dañada así como evitar complicaciones de posibles trombos y coágulos que pudieran surgir en su pierna derecha.
La trayectoria de la cornada fue de manera descendente, lo que causó también una gran afectación en vasto interno de su cuádriceps.
En el año 2013, la tauromaquia fue declarada por el Senado Patrimonio Cultural de España con el único apoyo del Partido Popular. La norma, publicada el 12 de noviembre de ese mismo año en el Boletín Oficial del Estado (BOE), obliga a las administraciones públicas a ‘garantizar y, a su vez, desarrollar unas medidas de fomento y protección en el ámbito de la Administración General del Estado’.
Sin embargo, no todas las comunidades apoyan firmemente la tauromaquia, entendida esta, no solo como la corrida de toros , sino como ‘el conjunto de conocimientos y actividades artísticas, creativas y productivas, incluyendo la crianza y selección del toro de lidia , que confluyen en la corrida de toros moderna y el arte de lidiar’.
En los últimos años, los movimientos a favor de los derechos de los animales han ido tomando fuerza y han conseguido que en ciertos lugares de España dejen de celebrarse corridas de toros , aunque estas no puedan prohibirse.
Así, la única comunidad autónoma española en la que, por ley, a día de hoy, no se realizan corridas de toros es Canarias . En el archipiélago existe una ley, que data de 1991, en la que se recoge que queda prohibido ‘utilizar animales en peleas, fiestas, espectáculos y otras actividades que conlleven maltrato, crueldad o sufrimiento ‘. La norma fue aprobada de forma rápida y sin apenas oposición, porque Canarias nunca tuvo una afición por los toros muy fuerte.
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